• Escuela de Formación del MCBA
• D.T.V. (Documento de Transito Vegetal)
• AFIP
Gustito a poco, es lo que ha dejado como resultado la escuela de formación del MCBA.
Poco, pues es tanto el camino perdido, que da la sensación que hubiese que cerrar las puertas, y comenzar desde un nuevo inicio toda la actividad.
Si bien algún filósofo, dijo, hace ya más tiempo del que llevan abiertos los mercados, “no he visto que nadie destruya una ciudad para construirla nuevamente, por el contrario, si las he visto modificarse de a poco” en el caso que nos atañe, parece que vamos a tener que desobedecer el pensamiento.
Son muchos los años que venimos cometiendo errores y “HORRORES” en el manejo de alimentos, con cada nueva dirección, nuevos nombres y con ellos nuevas promesas, la cuestión es que después de muchos discursos la problemática continúa sin resolverse.
La escuela de formación, en sí misma, como herramienta ha sido exitosa, en ella hemos abrevado sobre las nuevas formas de alimentación, por un lado, y de producción por otro; si bien los temas se han tratado desde una visión macro, han sido suficientes para marcar la distancia entre lo que llamamos “sistema alimentario” y lo que realmente debe ser un “sistema alimentario”.
En nuestro país, “el sistema”, puede ser interpretado según sea la situación de cada partícipe, situación que propone las acciones según el cargo o jerarquía de poder que se ostente; de los varios cargos que existen las sugerencias se dirigen a: 1) desde el mercado propiamente dicho “observar de qué manera se mantiene activo”; 2) desde el control sanitario “como y donde realizar la tarea sin mirar el costo social”; 3) desde el lugar donde se recauda “ cuantificar los resultados según los resortes normativos de lo que se pueda aplicar”.
Dentro de la cursada, bajo la temática de TRAZABILIDAD se explica el funcionamiento del DTV (Documento de tránsito vegetal), mecanismo fundamental para el crecimiento de nuestros productos en el exterior. –Esto merece una ampliación --: “para poder exportar, es necesario incorporar en el envase del producto, y a veces en el producto mismo, el camino recorrido por ese producto, desde la semilla hasta el hogar donde va a ser consumido” y junto al camino, todas las acciones realizadas por el hombre para lograr dicho cometido.
Esto está muy bien, pero vivimos en nuestro querido país, y cada acción que se propone, llega con premio sorpresa. Y ésta DTV, llega desde el SENASA en compañía de la señora AFIP. Y está muy bien, pues la TRANSPARENCIA es la hermana mayor de la TRAZABILIDAD. Imposible “la una sin la otra”.
Nuestra ley, 19227 ha sido la llave maestra para dos mecanismos que hasta el momento de su puesta en funcionamiento no existían. LABORATORIO y Dto. De Información Estadística y Desarrollo Comercial.
El Laboratorio, fundamental tanto para los controles que realiza el SENASA, como también para los particulares que solicitasen sus servicios; El departamento de información, también fundamental para obtener datos ciertos de la actividad a nivel nacional.
Aquí se aplica aquello de “destruir la ciudad” pues las GUIAS DE INGRESO DE PRODUCTOS FRUTIHORTÍCOLAS ideadas para el transporte e ingreso al MCBA, han funcionado perfectamente para los requerimientos de la época, y ahora se suplantarían por las DTV.
Los datos suministrados por el Dto Información Estadística en el día 14 noviembre 2016 sobre ingresos de octubre dicen que:
• Han ingresado por sus registros 821 especies y variedades de hortalizas y frutas del país.
• Han ingresado por el rubro Frutas 2.464.000 bultos
• Han ingresado por el rubro Hortalizas 4.852.000 bultos
• Total de guias registradas 20.344
• Para 500 firmas.
Sin comentarios solo preguntas. ¿Cómo resolver la temática de trazabilidad y transparencia utilizando un nuevo sistema cuya base de datos está aún en sus comienzos?
¿Por qué razón se desestiman, tanto la ingeniería de sistemas como los datos existentes?
¿Se quiere realmente mantener una industria alimentaria, o sólo recaudar donde se pueda?
Se alzan voces, ¿Existen oídos?
|15 de Noviembre de 2016|Comentario de Domingo Ramos Bravo|Especialista en Mercados Frutihortícolas|